Casa por cárcel
La reja, como símbolo de protección y separación entre espacio público y lo privado, sirve aquí de pretexto, nos enfrenta a una memoria, al mismo tiempo que por su título remite a una situación específica la de casa por cárcel, generando esa dualidad entre la memoria y realidad.
Casa por cárcel es un concepto que se distorsiona y confunde la verdad, la de una sentencia borrosa, que es excusa para una presentación en la pared, un dibujo que se desenfoca por la sombra que se genera entre el dibujo en el vidrio templado o de seguridad y su reflejo, el resultado, una doble lectura como la realidad; el vidrio grabado nos presenta en su transparencia el reflejo de lo que nos incomoda de igual manera que el recuerdo de una estructura en la memoria.